Proteja su iPhone frente a amenazas
gratis con Avast Mobile Security
- Seguridad
- Privacidad
- Rendimiento
Los juegos se han vuelto más realistas, épicos y divertidos. Sin embargo, para disfrutar de la mejor experiencia con los títulos para PC de hoy en día, necesita un equipo realmente potente. En esta guía le mostraremos cómo montar desde cero el PC perfecto para juegos. Ahorrará dinero si no compra un equipo prefabricado y, por si fuera poco, se divertirá.
Comencemos por lo principal: ¿por qué debería montar mi propio PC? ¿No puedo limitarme a comprar uno de Alienware, HP o Lenovo? La respuesta es: ¡desde luego! Pero es probable que gaste más en un PC prefabricado y no dispondrá de tantas opciones de elección de los componentes.
Muchas tiendas en línea le permiten elegir entre unos pocos procesadores, tres o cuatro configuraciones diferentes de módulos RAM y diversas tarjetas gráficas. Montar su propio PC le da la libertad para hacer todo lo que desee. Es suyo.
Este artículo contiene :
Antes de entrar en recomendaciones, vamos a ver los aspectos básicos. A continuación le indicamos las piezas necesarias para montar un PC para juegos completo.
El cableado de mi PC es un poco caótico, pero es mío al cien por cien. No lleva nada de fábrica. Y me ahorré algo de dinero en el proceso.
El procesador (o CPU, unidad central de procesamiento) es el corazón de un ordenador. Es el responsable de la mayoría de las operaciones que realiza. Para juegos, recomendamos elegir una CPU AMD o Intel de última generación con al menos seis núcleos.
Aunque los AMD son muy competitivos en el mercado actual de procesadores gracias a sus precios, Intel sigue siendo la referencia en lo que a juegos respecta. Sus CPU de gama alta son capaces de alcanzar velocidades de reloj superiores, que es lo que los juegos actuales requieren. Y ya que está montando su propio PC, podría interesarle también acelerar la CPU.
Aquí explicamos qué es la RAM, pero ¿cuánta necesita para jugar? La cantidad estándar es de 16 GB de RAM. Es más que suficiente para ejecutar sin problemas todos los juegos modernos. En nuestras pruebas, el salto a 32 GB de RAM tiene poco o ningún efecto en el rendimiento. Por eso yo me quedé en 16 GB, pero invertí en memoria de mayor calidad, con una frecuencia alta y latencia baja (haga clic en el enlace sobre la RAM, un poco más arriba, para averiguar qué significa todo esto).
La GPU (unidad de procesamiento gráfico) es clave para los juegos. Es probable que la GPU sea la pieza más cara de cualquier PC para juegos. Las tarjetas gráficas oscilan entre los 200 $ para un modelo para juegos barato, con resolución Full HD, y los 1500 $ para un auténtico monstruo de gama alta, capaz de funcionar a resolución 4K con total fluidez.
Disfrute de un rendimiento gráfico óptimo haciendo overclock a la GPU y actualizando los controladores gráficos.
Hágase con un SSD, y punto. (Si no está seguro de por qué, consulte nuestra guía sobre la diferencia entre SSD y HDD). Los días de los viejos discos mecánicos han quedado atrás. Aunque estos discos antiguos siguen siendo más baratos y en ocasiones son más grandes, ningún jugador debería cargarse la diversión cargando pantallas (perdón por el chiste). Con un SSD, en especial los del nuevo tipo NVMe, se obtienen velocidades de hasta 5 GB por segundo. Además, hágase al menos con 1 TB de almacenamiento, ya que hoy en día los juegos suelen ser bastante grandes. Algunos llegan a superar los 100 GB.
En cualquier caso, es importante ahorrar espacio suficiente para los juegos que quiera jugar. La función Limpieza del disco integrada en Avast Cleanup borra automáticamente archivos basura y otros programas innecesarios, de modo que tenga espacio suficiente para el próximo éxito de ventas AAA.
Si va a montar un sistema potente, con una tarjeta gráfica y un procesador de gama alta, hágase con una fuente de alimentación de al menos 700-1200 W.
Aquí puede ponerse creativo. Puede optar por una carcasa elegante, como la Fractal Design R7, o por algo más exclusivo, como la Thermaltake View 71 o la Snow Helicopter.
Elija lo que elija, asegúrese de que sea una carcasa E-ATX. Es el estándar empleado en los PC de tamaño completo y es importante para elegir la placa base apropiada. Hay cajas más pequeñas para PC diminutos, pero en este artículo nos centraremos en las torres de tamaño mediano o grande, ya que permiten un mejor flujo de aire y usar componentes de mayor tamaño.
Ningún PC para juegos está completo sin los accesorios apropiados. Estas son las principales necesidades:
Un monitor para juegos: Es probable que su viejo televisor o monitor no ofrezca una resolución suficiente para jugar de forma óptima, y que no sea compatible con las altas frecuencias de actualización que hacen que los juegos funcionen de forma fluida y precisa. Al comprar un nuevo monitor o televisor, compruebe que admita resoluciones WQHD (2560 x 1440) o 4K (3840 x 2160). Además, busque frecuencias de actualización de 120 Hz o más. Aunque los 60 Hz (para 60 FPS) le parezcan nítidos, una vez que vea las frecuencias de actualización por encima de 120 Hz, no querrá volver atrás.
Mando: Aunque un ratón y un teclado le ofrecen un control preciso para juegos de disparos y estrategia en tiempo real, muchos juegos de acción en tercera persona se controlan mejor con un mando. Es caro, pero mi favorito es el Microsoft Xbox Elite Controller 2. El precio es estratosférico, 179 $, pero a cambio obtiene la mejor calidad en los materiales, una buena empuñadura, botones conmutables y carga inalámbrica.
Ratón y teclado para juegos: Los normales no están pensados para jugar. Sobre todo en el caso del ratón, conviene decantarse por componentes especializados para el juego. Por ejemplo, el nuevo ratón G604 de Logitech ofrece una resolución de escaneado extremadamente rápida y más de una decena de botones programables.
Windows: Necesita Windows 10 para ejecutar los juegos actuales. Por suerte, las licencias no son muy caras, así que debería encontrar Windows 10 Home por menos de 50 $.
Un equipo para jugar puede ir desde solo 500 $ hasta los 5000 $. A la hora de decidir cuánto dinero invertirá en su PC y qué componentes debería comprar, el tipo de juegos a los que está destinado es un factor muy importante.
Entre los juegos de gama baja están aquellos de hace más de cinco años, los de navegador y los de estrategia 2D más sencillos. Ninguno de ellos requiere una gran potencia. Por tanto, si es todo a lo que va a jugar, no es necesario comprar un PC especializado, ya que la mayoría de estos juegos funcionará en equipos normales de sobremesa para oficina o multimedia.
Una captura de pantalla de un juego antiguo de gama baja.
Fortnite, Valorant, Minecraft, DOTA, League of Legends y títulos similares están muy optimizados para la experiencia multijugador. Funcionarán bien incluso en PC poco potentes.
Una captura de pantalla de Fortnite.
Si le gustan los éxitos más recientes y quiere disfrutar hasta del último píxel, sin duda le conviene invertir en un PC para juegos, y necesitará al menos una tarjeta gráfica de gama media.
Una captura de pantalla del juego de gama alta Horizon Zero Dawn, con la configuración 4K Ultra.
Esta es la pregunta más importante: ¿qué resolución quiere alcanzar? Las resoluciones más comunes son Full HD (1920 x 1080), QHD (2560 x 1440) y 4K (3840 x 2160). La mayoría de los televisores y pantallas vendidos en los últimos 10 años admiten solo Full HD. Notará una cierta pérdida de fidelidad visual en Full HD, en comparación con las resoluciones superiores.
Muchos monitores para juegos admiten QHD, que supone una mejora apreciable en cuanto a fidelidad respecto a las pantallas Full HD. La resolución 4K la tenemos en casi todos los televisores actuales y supone cuadruplicar la densidad de píxeles de un PC normal.
La clase de pantalla que tenga o que quiera comprar tendrá un efecto significativo en las especificaciones de hardware de su PC. El motivo es que las resoluciones superiores exigen una mayor potencia del equipo.
Cuando haya elegido, será el momento de montar el PC. A continuación están nuestras especificaciones recomendadas en función de la resolución.
Presupuesto: 900 $
CPU: AMD Ryzen 3600 (6 núcleos, 4,2 GHz): ~200 $
RAM: G.SKILL F4-3600C19D-16GVRB Ripjaws V: ~75 $
Refrigeración: refrigeración líquida Cooler Master ML240: ~80 $
Placa base: Asrock B450M: ~80 $
Tarjeta gráfica: AMD Radeon RX580: ~180 $
Disco duro: Crucial P1 1 TB 3D: ~100 $
Fuente de alimentación: Cooler Master MasterWatt 550: ~90 $
Carcasa: Thermaltake S300: 80 $
Coste total: ~885 $
Este equipo se basa en una CPU AMD de última generación con seis núcleos. Como los juegos comienzan a tener un mejor rendimiento en las CPU con al menos cuatro núcleos, disfrutará de una mejora apreciable. También hemos instalado RAM con una frecuencia superior, 3600 MHz, y, sobre todo, nos hemos decantado por la que creemos la mejor tarjeta gráfica de bajo presupuesto: la RX580.
Esto debería bastar para superar los 60 FPS en muchos juegos recientes, incluso con requisitos elevados de configuración. Podría recortar gastos en el procesador o en la tarjeta gráfica y, aun así, alcanzar los 60 FPS en los juegos actuales, pero este modelo está más preparado para el futuro. Como mínimo, debería permitirle disfrutar de los juegos más recientes durante un par de años.
Como los juegos tienden a comerse el espacio de disco, ni intentamos ahorrar en una unidad más barata de 500 GB. Andaría quedándose todo el rato sin espacio y no resulta muy divertido estar desinstalando y reinstalando juegos. El disco de 1 TB elegido no es el más rápido del mercado, pero 2 Gbps deberían bastar para cargar rápidamente la mayoría de los juegos.
Presupuesto: 1600 $
CPU: Intel 10600k (6 núcleos, 4,8 GHz): ~290 $
RAM: G.SKILL F4-3600C19D-16GVRB Ripjaws V: ~75 $
Refrigeración: refrigeración líquida Cooler Master ML240: ~80 $
Placa base: GIGABYTE Z490 VISION G: ~200 $
Tarjeta gráfica: EVGA GeForce 2060 Super: ~425 $
Disco duro: Samsung 970 Evo: ~180 $
Fuente de alimentación: EVGA 700 BR: ~100 $
Carcasa: Thermaltake View: ~180 $
Coste total: ~1530 $
Ascendemos por la cadena alimentaria: Para lograr una frecuencia de actualización ultrarrápida con resolución QHD (2560 x 1440), necesitará más potencia de CPU y GPU. Por eso nos decantamos por Intel, ya que sus procesadores ofrecen mayor velocidad que sus equivalentes de AMD.
En nuestras pruebas, una GPU 2060 Super combinada con una CPU Intel rápida ofreció un asombroso promedio de 90 FPS tras analizar diez juegos distintos. Fortnite, Wolfenstein: Youngblood y Grand Theft Auto V funcionaban a mas de 100 FPS con esta tarjeta. ¡Hace solo dos o tres años, lograr un rendimiento así hubiera costado 3000 $!
En cuanto al disco duro, nos decidimos por un Samsung 970 Evo de 1 TB, más rápido.
Presupuesto: 3300 $
CPU: Intel 10900k (10 núcleos, 5,2 GHz): ~760 $
RAM: G.Skill Royal Z 4266 MHz RAM: ~370 $
GPU: EVGA GeForce 2080 Ti: ~1150 $
Refrigeración: Thermaltake 360 RGB Sync: ~160 $
Placa base: MSI Z490 Meg Ace: ~390 $
Fuente de alimentación: EVGA SuperNOVA 1200 P2: ~320 $
Carcasa: Fractal Design Define R7: ~150 $
Coste total: ~3300 $
En esencia, esos componentes son los que he utilizado para construir el PC al escribir este artículo. Creé el equipo desde cero para ofrecer una experiencia fluida con resolución 4K y el máximo nivel de detalle.
Primero, subimos hasta un Intel Core i9 10900k, que cuenta con 10 núcleos a un máximo de 5,2 GHz. Ahora mismo, es el buque insignia de Intel en cuanto a CPU para juegos. Aunque no ofrece el rendimiento multimedia o de productividad de un AMD Ryzen (que cuenta aun con más núcleos), su elevada velocidad de reloj le da una gran ventaja para juegos.
En cuanto a la RAM, subimos hasta unos módulos extremadamente rápidos de 4266 MHz, mientras que como GPU recomendamos la mejor que hay disponible: la poderosa 2080 Ti.
Para enfriarlo todo, la refrigeración líquida 360mm Thermaltake. Junto con la elegante carcasa de Fractal Design, es todo lo que un jugador puede desear.
Busque un lugar espacioso y bien iluminado donde pueda extender todos los componentes. En mi caso fue la encimera de la cocina, pero seguro que usted da con un lugar mejor. Por raro que parezca, la única herramienta real que necesité fue un destornillador normal, aunque no está de más prepararse, ya que algunas cajas y componentes pueden ser difíciles de abrir. Esto es lo que necesita:
Alfombra y guantes antiestáticos: Basta con caminar (sobre todo por un suelo con alfombra) para acumular electricidad estática. Podría dañar los componentes al tocar elementos como la placa base o la GPU, pero este peligro se evita con una alfombra antiestática.
La alfombra también previene que el equipo se raye o se abolle al manipularlo. Yo utilice para mi equipo una manta de microfibra antiestática de buen tamaño. También es recomendable utilizar guantes antiestáticos para evitar por completo cualquier clase de descarga. Se pueden conseguir fácilmente en Amazon, Newegg o su proveedor local favorito.
Destornilladores: Si no tiene ya en su casa todos los destornilladores que necesita, hágase con un juego estándar.
Pasta térmica: Es necesario aplicar esta pasta en la CPU antes de acoplar el refrigerador (más adelante hablaremos de esto). Sin embargo, algunos refrigeradores (como el Thermaltake 360 RGB que compré para mi equipo) ya llevan pasta térmica aplicada.
Ahora que tiene todos los componentes, es hora de preparar la bestia. Esta es una guía paso a paso para montar un PC para juegos:
La carcasa suele llegar de fábrica prácticamente montada y no hay que hacer mucho más que instalar los componentes.
Preparación de la carcasa.
Mi carcasa requirió un poco de cableado. ¿Ve los puertos USB y el botón de encendido en la parte superior? Tuve que meter un cable y llevarlo por la parte posterior para conectarlo a la placa base.
También deberá retirar las tapas de las ranuras posteriores para encajar la tarjeta gráfica. Si ha comprado ventiladores adicionales, este es un buen momento para instalarlos.
No ponga todavía la placa base. Hay que instalar antes el procesador y la memoria. En cualquier caso, tenga todos los cables preparados.
Una placa base MSI Meg Z490.
Abra la tapa de la placa base e inserte la CPU. Verá que tiene pequeñas muescas a cada lado para ayudarle a encontrar la orientación correcta.
Una CPU Intel Core i9 10900k.
Inserción de la CPU.
Como estamos integrando refrigeradores Thermaltake en nuestros equipos, puedo recomendar con conocimiento de causa sus manuales del usuario. Vaya a la sección Descargas del sitio web de Thermaltake, seleccione User Manual (Manual del usuario) a la izquierda y elija en la lista la categoría del producto y el modelo. Son manuales muy útiles y le ayudarán a conectar correctamente todos los cables. No es un trabajo difícil, pero puede requerir un poco de manipulación.
Montaje del refrigerador líquido.
Asegúrese de utilizar las piezas adecuadas para su procesador, ya que las unidades AMD e Intel tienen formas y tamaños diferentes.
Vamos a poner un poco de pasta térmica en el procesador:
Aplicación de pasta térmica en la CPU.
Atornille firmemente el refrigerador líquido desde la parte posterior de la placa base, asegurándose de que no quede nada suelto. A continuación, conecte los cables FAN y PUMP en los puertos correspondientes de la placa base.
Instalación de un refrigerador líquido en un PC
Si tiene dos módulos de RAM, instálelos en las ranuras A2 y B2. Si solo tiene uno, ocupe la ranura A1. Sujete el módulo o módulos de RAM por los lados y no toque los conectores dorados.
Inserción de RAM en la placa base de un PC: ¡tenga cuidado de no tocar los conectores dorados!
¿Ve la pequeña ranura donde dice «M2»? Ahí es donde tiene que conectar su pequeño y flamante disco duro SSD. En mi placa base, estaba cubierto por un disipador de calor. Aparte de eso, no es muy diferente a conectar una memoria flash.
Instalación de un SSD NVMe en la placa base de un PC.
Ponga la placa base en la carcasa y atorníllela con firmeza. ¿Ve los puertos en el lateral? Alinéelos con los huecos en la carcasa.
Inserción de la placa base en una carcasa de PC con todos los puertos correctamente alineados.
Al mismo tiempo, instale el refrigerador de agua en la parte superior o inferior de la carcasa. En mi ejemplo, va en la parte superior.
Instalación del refrigerador líquido y atornillado a la carcasa.
Esta fue la parte más complicada para mí, porque los refrigeradores líquidos suelen tener cables extremadamente largos para la iluminación y el funcionamiento del ventilador. Por suerte, pude pasarlos por la parte posterior de mi carcasa.
Una carcasa de PC con cables de refrigeración sobresaliendo por detrás.
Aquí resultan útiles las bridas para cables, de modo que hasta la parte posterior de su equipo personalizado quede ordenada y aseada. No debe hacer lo que hice yo en esta fase, que fue meter los cables de cualquier manera y taparlos con la placa lateral de la carcasa. Eso es como ocultar lo barrido debajo de la alfombra. (Y no se preocupe, que después lo arreglé).
Ahora, inserte la fuente de alimentación y conecte el conector principal a la placa base. Es el mayor de todos.
Conexión de la fuente de alimentación para un PC nuevo.
Ahora, vamos a instalar la tarjeta gráfica. ¿Ve las tres o cuatro ranuras anchas en la placa base? Coloque con cuidado la tarjeta gráfica de modo que los pines se alineen y presione con firmeza cuando esté casi dentro. Hay una pequeña pieza que se encajará sola.
Una tarjeta gráfica NVIDIA GeForce GTX insertada en una placa base.
A continuación, conéctela mediante uno de los cables de alimentación VGA incluidos con la fuente de alimentación.
Conexión de los cables de alimentación a la tarjeta gráfica.
Pues ya debería estar todo. ¿Listo para el gran momento? Conecte al PC el cable HDMI o Displayport de su monitor, el ratón y el teclado mediante USB, y el cable de alimentación. Para el primer arranque, conecte solo lo imprescindible.
Pulse el botón de ENCENDIDO y... cruce los dedos con la esperanza de haberlo conectado todo correctamente. No obstante, no se preocupe: si algo no está bien conectado, la placa base simplemente apagará el sistema o detendrá cualquier operación para mostrar un código de error y evitar daños.
¿Ha intentado encender el PC por primera vez y no pasa nada? ¿La pantalla sigue en negro? Ahora llega la parte complicada: ¡averiguar qué sucede!
Aunque mi equipo para juegos actual se encendió a la primera (lo que me sorprendió, para ser sinceros), otros PC para juegos que he montado en el pasado no han mostrado el mismo espíritu de colaboración. Esto es lo que debe hacer en esos casos.
Conecte el ratón, el teclado y el monitor. Nada más. Cualquier unidad USB podría impedir el arranque del sistema.
Puede que el nuevo PC arranque con una resolución incompatible con su pantalla, sobre todo si se trata de un televisor o un proyector. Conéctelo a un monitor normal.
Asegúrese de que ha conectado los cables correctos. A continuación, desconéctelos y vuelva a conectarlos. Compruebe también que el refrigerador líquido esté funcionando correctamente. Debería escuchar el sonido de un chorro las primeras veces que lo encienda.
Las placas base modernas cuentan con pequeñas pantallas que muestran la temperatura actual o, en caso de problemas, un código de error. Consulte el manual para averiguar qué significa un código de error dado. Lo encontrará en la caja o, si lo ha tirado, en Internet.
Si no entiende lo que significa un código de error, búsquelo en Internet. Es muy probable que alguien haya hecho ya la misma pregunta.
Algunas placas base no tienen pantallas y señalan los errores mediante un pitido o una serie de ellos. Esté atento a ellos y anote la duración de cada pitido. Por ejemplo, una secuencia de dos pitidos cortos y uno largo podría indicar un error de memoria.
En ocasiones, es necesario devolver por completo el BIOS a su configuración predeterminada o segura. Algunas placas base incluyen para este propósito un «jumper» (conmutador) especial. Otras cuentan con un botón dedicado que indica «Clear CMOS» (Borrar CMOS).
Si sigue sin dar con el problema, pruebe a retirar algunos de los componentes. Comience por la tarjeta gráfica y pruebe a cambiarla por otra. Haga lo mismo con la RAM. Si eso falla, tal vez deba probar con un procesador distinto. Es mucho trabajo, pero en algunos casos no hay otra opción.
Su nuevo PC funcionará extremadamente rápido al principio y nuestro consejo es que no lo lastre con demasiados programas. Incluso los modernos equipos para juegos pueden empezar a fallar cuando los programas comienzan a acumular tareas en segundo plano. Limpie su PC para evitar que esto suceda.
Mejor aún, instale Avast Cleanup y active su función integrada de Mantenimiento automático. También puede utilizar la Limpieza del disco incluida para reservar más espacio a los juegos. Por su parte, la función Modo de suspensión pone en reposo otras aplicaciones.
Montar un PC para juegos no es una tarea sencilla. He pasado meses buscando los componentes apropiados y estas recomendaciones se basan en mi propia experiencia. Espero haberle ahorrado algún tiempo.
Prepárese para dedicar medio día o más al ensamblaje del PC, e incluso más si tiene algún problema. Sin embargo, siguiendo esta guía estará en el buen camino para construir el PC para juegos de sus sueños.